martes, 7 de agosto de 2007

De compras por el Mall

Como decía en el último post, el domingo después de madrugar nos fuimos al Mall de compras. Para ello tuvimos que coger el Rapid Ride (bus) en frente del Frontier (un restaurante muy típico de la ciudad). Aquí los autobuses está muy bien, con su aire acondicionado y sus cosas, pero se utilizan muy poco. Prueba de ello es que duran sólo hasta las 17:30. El billete vale $1 y te dan un papel con el que puedes coger cualquier otro bus para volver durante las próximas 4 horas o así.

El Mall está un poco lejos de la universidad y nos tuvimos que bajar hasta la última parada. El sitio es como un centro comercial INMENSO lleno de tiendas, de ropa sobre todo, y de restaurantes de comida rápida. Lo primero que hicimos fue ir a comer al Panda Express, un restaurante de comida rápida china. Te ponías en una cola y te daban una bandeja, y ibas pasando por unos cristales con comida y le decías a los chinos lo que querías que te echasen. Podías elegir un acompañante (arroz o tallarines) y dos segundos platos por $5.70. La bebida iba aparte. Comimos muy bien en ese sitio, o al menos mucho mejor que en un McDonald. Estaba todo muy rico aunque muy picante.

Después de llenarnos la barriga nos separamos para cada uno comprar sus cosas. Yo realmente no conocía ninguna tienda ni sabía que ropa vendían en cada sitio, por lo que pasé todo el tiempo entrando una por una y mirando aténtamete. Me llamó la atención que había varias tiendas SÓLO de gorras, varias SÓLO de zapatillas de deporte, y otra sólo de cosas de rugby. Además en todas las tiendas de deportes venden calzonas de baloncesto muy anchas. Todos los americanos tienen una o varias de esas, absolutamente todos, así que me tendré que comprar yo una para sentirme un poco yanki. También venden en algunos sitios camisetas de rapero que te llegan a la rodilla, no como las que venden en España, sino mucho más largas. Y en cuanto a precios, similar a España. Había sitios caros, y otros mucho más baratos, y marcas buenas como Levis que en España valen un pastón aquí valen $30, así que no está mal.

Unas 2 horas después de estar visitando tiendas sin comprarme nada (habría visto sólo la mitad del Mall más o menos), me llamó Ricardo para decirme que nos íbamos ya. Por supuesto, tuvimos que esperar a que las mujeres entrasen a "sólo dos tiendecitas más", y al final estuvimos allí dentro casi otra hora. No hace falta decir que no compraron nada.

Llegamos al bus y ya se había pasado la hora del ticket de vuelta. Todos mis compañeros sacaron un euro para pagar de nuevo, pero yo como buen español tenía que intentar colárselo a la conductora, jajaja. Así que doblé un poco el papel, se lo enseñé de lejos y me dejó pasar. Se quedaron todos muy sorprendidos, aunque la mexicana se arrepintión de no haber hecho ella lo mismo.

Por fin llegamos a casa. Estábamos echos polvo de tanta compra, porque como todo el mundo sabe las compras destruyen el cerebro. Esa noche hicimos una cena conjunto. Cada uno sacó comida y preparó lo que pudo: Berenice arroz y platano frito, Jose algo de carne y frijoles, Paulina compró cocacola y cervezas porque al día siguiente se iba y no tenía comida, y yo preparé una ensalada con aceite de oliva español. Como me pasa siempre en esta casa, comí hasta no poder más y después de un rato de charla me fui a mi habitación a acabar el handout de la presentación que tenía que hacer. Cuando acabé a las 11:30 ya se había ido todo el mundo a la cama, así que no me quedó más opción que leer un rato Harry Potter antes de acostarme yo también.

(Siento no tener fotos del Mall, pero es que me dejé la cámara encima de la mesa justo antes de salir de casa xD)

1 comentario:

Unknown dijo...

jeje Que cerdete lo del bus y el ticket es muy español jeje se nota que no se esperaban la jugada... tambien es que los de caceres sois unos vivos XD. Espero que no vuelvas convertido en un barril te tienes que estar poniendo fino macho.